Los embalajes utilizados para el transporte, ya sea en el sistema de “paquetería” o en cargas unificadas, como palés o cajas específicas, deben soportar los efectos del transporte. Vibraciones, golpes, impactos, compresiones y otros, son algunos de los efectos/riesgos que todo tipo de embalaje sufre durante el circuito de transporte.

El aumento exponencial de las ventas en línea, así como la preocupación medioambiental por reducir la cantidad de envases, exige un conocimiento cada vez mayor de toda la cadena de distribución. Asegurar que el envase tiene la resistencia necesaria y suficiente para garantizar la integridad del producto hasta que llega a la mano del cliente es uno de los principales objetivos de cualquier proveedor. Las pruebas de simulación de transporte se realizan no sólo para evaluar los efectos del transporte sobre el producto, sino también para comprobar la idoneidad del diseño del envase en la interacción entre éste y el producto durante todo el proceso logístico.

Conocer los riesgos del transporte y su interacción en la relación entre producto y envase, así como los documentos normativos existentes, son algunos de los puntos que pretendemos destacar.